¿Quién dijo que no podemos comer pizzas mientras nos estamos cuidando? Hoy les traigo una receta de pizza con masa integral de otro mundo!
Como ya les comenté en otros posteos, la clave para una vida healthy es hacer pequeños reemplazos. En este caso, reemplazar las harinas blancas por harina integral. Es mucho mejor porque aporta vitaminas, fibras y llena más. ¡Y está permitida en la dieta! Vamos con la receta...
Ingredientes:
- 1 kg de Harina Integral
- 30 gs de levadura fresca
- 3 cucharadas de aceite (el de preferencia)
- 2 cditas de azúcar
- sal a gusto
- 500 cc de agua tibia
- Para el toping:
- Salsa de tomate
- 500 gs de queso cremoso (O muzzarella)
- Colocamos en un bowl la harina, hacemos un hueco y colocamos la levadura con el azúcar y el aceite, y alrededor del hueco ponemos la sal (No debe tocar la sal con el azúcar), poner el agua de a poco en el centro y con un tenedor ir integrando. Una vez que tomo consistencia, pasarlo a una mesada limpia y amasar con las manos, aproximadamente entre 5 y 10 minutos. Cuanto más amasado, mejor resultado. Pueden golpearla contra la mesa.
- La colocamos nuevamente en el bowl y le tiramos un chorrito de aceite para que no se seque, tapamos con un repasador o papel film y dejamos descansar, hasta que duplique tamaño. (Yo espero entre 30 y 45 minutos, dependiendo el día, si hace calor, con 30 es suficiente, pero si está fresco, recomiendo dejarla 45 minutos)
- Dividimos la masa en cuantas pizzas queramos, ponemos en las pizzeras y nuevamente dejamos leudar 15 minutos.
- Poner en horno a fuego moderado tirando a fuerte, tarda 20 a 30 minutos en cocinarse. Luego agregar la salsa de tomate y el queso y dejar gratinar. Condimentar a gusto con orégano, perejil o lo que les guste.
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